Si bien no existe una fórmula mágica que nos permita garantizarle a nuestros clientes el cien por ciento de triunfo, sí hay aspectos que una vez dominados, nos hacen sentir confiados que los resultados serán siempre positivos.

Estudia + Analiza + Redacta = Triunfa
Esta fórmula me ha funcionado a la maravilla. Si intentas redactar sin haber estudiado o analizado, dará la impresión que hablas tartamudeando, si las ideas no están organizadas en tu cabeza no fluirán al escribirlas.
- Estudia. No hablo de estudiar de forma escolarizada, sino de estudiar todos los asuntos que te lleguen a conciencia. Leer detalladamente la legislación aplicable, consultar el Semanario Judicial de la Federación, leer ejecutorias, sentencias públicas, observaciones, recomendaciones y todo lo que encuentres respecto al tema en cuestión. NUNCA habrás leído lo suficiente, en esta profesión (como en muchas) estudiar es la constante.
- Analiza. Es común encontrar un precedente bueno y querer encajarlo en nuestro asunto, sin embargo, debemos analizar primero TODAS las variantes para asegurarnos que realmente aplique pues en ocasiones no lo hace ni por analogía. Este punto es muy importante, porque no solo puede llevarte a caer en una falacia que te hará perder el juicio, sino que además modifican de forma negativa los precedentes existentes. Después de haber estudiado un asunto, en lo personal me tomo uno o dos días antes de empezar a redactar, este descanso me sirve para organizar mis ideas y refrescar mi cerebro.
- Redacta. La redacción es quizás el cincuenta por ciento del trabajo, en lo personal yo manejo unos estándares muy estrictos que raras veces rompo, siempre recordando no aburrir a la persona que lee la demanda pues quiero que recuerde fácilmente lo que dije; entre ellos están: Ser breve; no dar clases de Derecho; limitar los precedentes a uno por Concepto de Impugnación; plantear la controversia en forma de silogismo, la autoridad dijo, la ley dice y yo digo; cuidar la ortografía, los márgenes e interlineados; y SIEMPRE dar una leída a la demanda completa para una edición final.

Aunque todos tenemos técnicas distintas, el común denominador entre los abogados que triunfan siempre es el ESTUDIO; pero no creas que son cualidades con las que naces, estas se crean, si quieres cambiar tu perfil en la abogacía recuerda que no hay tiempo límite, empieza cuando tú quieras, pero empieza.
Lic. Sandra Climent Arredondo.